Nuevamente, TRG presenta un nuevo ERTE, que reducirá los salarios de sus trabajadores y trabajadoras, con el que se alimentará, también nuevamente, de las prestaciones por desempleo de los y las trabajadoras y del fondo de dinero público que tiene el SEPE para ello.
Tubos Reunidos, ya no ve los ERTE como una herramienta excepcional, para situaciones de necesidad, en las que “se tira de la anilla” cuando la coyuntura es crítica.
En la actualidad, ellos cuentan anualmente con el dinero público y los salarios de sus trabajadores, como un recurso más para especular y para mejorar sus beneficios. Lo están tomando como una parte de su tesorería.
Lo usan para, una vez más, después de aprovechar al máximo los momentos dulces del mercado y subir los precios de venta a niveles históricos (produciendo por demás en esos momentos), para poder tener después la maquinaria en ralentí sin adaptar los precios, hasta otro momento de repunte del mercado.
Todo esto, protegiendo su caja a costa de trasladar el peso económico de esa estrategia de producción irregular, en los salarios y subsidios por desempleo de los y las trabajadoras y, por supuesto, en las arcas públicas de todos y todas.
En cada negociación de cada ERTE, para algunos, parece que solo importa sacar unos complementos que nos hagan cobrar algo más durante los ERTE.
Pero nosotras vemos otros peligros.
¿Qué va a pasar cuando muchos no tengamos paro?
Si los ERTE van a ser lo habitual, ¿Que va a usar en TRG, cuando la situación sea excepcional y crítica de verdad?
A nuestro juicio, es fácil sacar una calculadora y enseñar unas cifras en euros a la plantilla, para presionar a otras secciones sindicales en las negociaciones, pero, también creemos, que lo realmente difícil y necesario, es poner barreras a posibles situaciones futuras, más dramáticas, y buscar la manera de decir basta a esta política empresarial, que no hace sino reducir los salarios y derechos de la plantilla.
Hay que tener en cuenta, que, en cada ERTE planteado, la “moraleja” de la DTRG al final de las causas que alegan, es que sobramos trabajadores y trabajadoras para producir en TRG.
Además, estamos viendo cómo, las escasas, a nuestro juicio, ganancias del convenio firmado en 2023, se las están cobrando ahora con la concatenación de estos dos ERTE y, mucho nos tememos, que se las van a seguir cobrando, porque, aunque complementen al 100% nuestros salarios en regulación, se siguen ahorrando un pastizal, que es lo consumen de nuestras cartillas del paro.
Es un negocio redondo… o un atraco a mano armada avalado por las instituciones, mas bien.
Es el ya clásico “privatizar ganancias y socializar pérdidas”.
Ya ni se molestan en bajar relevos y redistribuir a la plantilla para cubrir vacantes o absentismo. Ese absentismo que les preocupaba tanto en la negociación del convenio, para quitarnos los complementos en las bajas por enfermedad, pero que ahora les da igual aumentarlo mandando a la plantilla al paro.
Pero cada día están más crecidos en las negociaciones. Entregan la información cuando quieren y la que quieren y se pitorrean cuando exigimos respetar los derechos de la plantilla (como en los cambios de calendario de esta semana, por ejemplo).
Luego tienen el morro de convocarnos por secciones sindicales, para hablar de cómo mejorar las relaciones laborales…
Terminamos diciendo, que, decidir nuestra postura, está siendo difícil, dado que somos la única sección sindical, que no ve claro este “acuerdo sin acuerdo” y, por ello, hemos querido esperar a tener varios encuentros con la plantilla, tanto en nuestra asamblea de ESK, como en la asamblea general de fábrica.
Nos resulta curioso, que hayamos llegado a un punto en que sea criticado, quien prefiere consultar sus decisiones con afiliación y resto de la plantilla.
De todas formas, lo que, si creemos, es que está plantilla debería darle una vuelta a todo esto y replantearse, si queremos seguir una estrategia continua de "aguantar el chaparrón", caiga lo que caiga, o plantar cara a una dirección, que pasito a pasito, nos va ganando terreno.
Que no sea porque no avisamos:
CREEMOS QUE UNA ACTITUD POCO COMBATIVA, PUEDE LLEVAR A PENSAR A LA EMPRESA, QUE PUEDE APRETARNOS LAS TUERCAS, SIEMPRE UN POCO MAS.
De todas formas, lo que, si creemos, es que está plantilla debería darle una vuelta a todo esto y replantearse, si queremos seguir una estrategia continua de "aguantar el chaparrón", caiga lo que caiga, o plantar cara a una dirección, que pasito a pasito, nos va ganando terreno.
Que no sea porque no avisamos:
CREEMOS QUE UNA ACTITUD POCO COMBATIVA, PUEDE LLEVAR A PENSAR A LA EMPRESA, QUE PUEDE APRETARNOS LAS TUERCAS, SIEMPRE UN POCO MAS.
Y NO, COMBATIR NO ES SOLO IR A LOS JUZGADOS, COMBATIR ES TAMBIÉN, ALGO QUE NO PRACTICAMOS DESDE HACE YA 12 AÑOS.