La empresa IGR (Investigación y Gestión de Residuos), hizo entrega, a las delegadas de prevención, de los informes sobre las mediciones realizadas los días 7 y 8 de marzo en el Horno del Calibrador.
Los resultados nos dicen que los residuos SOLIDOS, del interior del Horno y del sotano del mismo, analizados dan positivo en amianto, que se cataloga como "friable" (que puede desprender fibras, que a su vez pueden quedar suspendidas en el aire y ser inhaladas). Además, nos comentan que, al picar dicho material, todavía es más claro que se han desprendido fibras de este tipo al ambiente.
Por otro lado, las mediciones ambientales han dado todas valores por debajo de 0,01 fibras/cm3 (hay que tener en cuenta que son fibras microscópicas) y, según la normativa, serían unos valores aceptables para poder trabajar (hablamos de las inmediaciones del Horno, no de las personas que estuvieron trabajando dentro del mismo).
Desde ESK les hemos preguntado, si, habiendo pasado 8 días desde la paralización de la obra, hasta la realización de las mediciones, no podría haberse "rebajado" la concentración de fibras en el ambiente de esa zona (debido a las corrientes de aire del pabellón) y que, si se hubieran hecho mediciones los dias en los que la obra estaba en marcha y alguno posterior, ellos veían que podrían haberse dado otros resultados menos aceptables.
Contestan que, aunque ellos creen que las mediciones realizadas pueden dejarnos tranquilos, no pueden contestarnos a esa pregunta, precisamente porque no existen mas que las mediciones que nos han entregado. Aunque, insistiendo, nos reconocen que, probablemente, unas hipotéticas mediciones en días mas cercanos a la realización de la obra o durante la misma, hubiesen dado valores más altos.
Dicho esto, nos intentan tranquilizar, porque aseguran que han sido lo más restrictivos posible con estas mediciones y que teniendo en cuenta las cantidades detectadas y el tiempo de exposición, ellos creen que no hemos tenido un riesgo ambiental a tener en cuenta fuera del horno.
Otro asunto es la exposición que han sufrido las personas del interior del horno, que estuvieron trabajando directamente con el amianto.
En este caso, desde la dirección se asegura que esas personas estuvieron en todo momento con mascarillas FFP3, algo que, según IGR, sería la mínima protección respiratoria exigida por la normativa.
Nosotras aquí hemos querido dejar claras varias cosas:
- Esta empresa ya sabe la edad de cada instalación de fábrica y que el amianto era usado en las décadas entre los 60 y los 90 como aislante indiscutible para construcción de hornos.
- Esta empresa ya actuó en 2005, en base a la normativa del año 2001 y posteriores, en otras instalaciones como el horno de solera, retirando amianto de las misma.
- Esta empresa debería haber previsto o sospechado, la posibilidad de la existencia de amianto en un horno con los años que tiene el del Calibrador (por eso la Seguridad y Salud Laboral, preferimos llamarla PREVENCIÓN de Riesgos Laborales).
- En base a esto, la actuación en el mismo, debería haberse llevado a cabo con un procedimiento/protocolo especial, que no pusiese en riesgo innecesario a ningún trabajador o trabajadora.
- Esto se debería haber hecho hace casi 20 años, cuando se realizó una campaña de localización de instalaciones con posible contenido en amianto y de identificación de posibles trabajadores veteranos, que hubiesen trabajado con amianto, pero a la vista está que no se hizo, PORQUE ES AHORA, EN 2024, Y DESPUES DE PONER EN RIESGO A LAS TRABAJADORAS, CUANDO VAN A PONERSE A HACER DICHO PROTOCOLO.
La dirección nos asegura que SI se va a crear dicho protocolo está vez y además, se disculpan por no haber actuado bien cuando empezó este asunto, ya que no avisaron a las delegadas de prevención del posible riesgo, en cuanto tuvieron la primera sospecha.
Nosotras añadimos, que lo peor fue, que había un posible riesgo y no se informó a tiempo a la PLANTILLA que trabaja en la zona, ni se señalizó e identificó debidamente dicho riesgo hasta casi una semana después de paralizar la obra.
IGR nos explican que, en las semanas siguientes, van a empezar a limpiar las instalación (solo el amianto desprendido, NO SE VA A ELIMINAR TODO EL AMIANTO DE LA INSTALACIÓN), para lo cual, van a aislar el horno totalmente, excepto salidas controladas para las ventilación y la salida y entrada de las trabajadoras de IGR y los residuos que vayan limpiando.
Todo ello, aislando los residuos, sin contaminar el exterior y con un protocolo de descontaminación para las trabajadoras que estén dentro antes de salir.
Se harán mediciones también durante la limpieza, en una frecuencia de 1 cada 7 horas.
La obra finalizará cuando el amianto desprendido haya sido eliminado, se haya aislado el que quede en la instalación y se constate que no hay amianto en el interior con nuevas mediciones.
Acabada esta operativa, se volverá a revestir el horno y se volverá a trabajar con normalidad, pero teniendo esta instalación identificada, para no cometer el mismo error en un futuro.
Esperamos que así sea, pero no en esta, sino en ninguna instalación más.
Para finalizar, se nos traslada desde el servcio médico que Osalan ha informado que NO CONSIDERA QUE HAYA TRABAJADORAS O TRABAJADORES AFECTADOS A LOS QUE SE TENGA QUE HACER UN SEGUIMIENTO ESPECÍFICO.
Esto es algo que no entendemos y queremos verificar, porque las trabajadoras que estuvieron trabajando dentro del horno estuvieron directamente en contacto con el amianto y sin saberlo, por lo que no sabemos hasta que punto se ha valorado su exposición.
No obstante, desde TRG nos dicen que no van a meterse en el terreno de las contratas TECRESA y JAUREGUI, porque es algo que no es su responsabilidad y no pueden legalmente hacer nada.
Desde esta parte, les hemos recordado que son compañeras de TRG, que por intereses empresariales e injustamente, no están contratadas por la casa, pero siguen siendo compañeras que trabajan con nosotras a diario.
También les recordamos, que el amianto no pertenece a TECRESA, ni a JAUREGUI y que la responsabilidad de la exposición al riesgo es UNICAMENTE de TRG.
Y que, aunque legalmente no puedan hacer nada, si pueden exigir a las empresas a las que pagan por sus servicios, que ESAS TRABAJADORAS DEBEN TENER TODAS LAS GARANTÍAS NECESARIAS EN UN CASO TAN GRAVE COMO ESTE.
Nos llama la atención, que se intente tanto quitar hierro a la gravedad de la exposición de estas personas, que trabajaron dentro del horno, viendo lo riguroso que es el protocolo de descontaminación de IGR, que van a entrar con unas medidas extremas a trabajar también en el interior.
Sobre todo nos llama tremendamente la atención, que la persona que más hierro del quite a esto, durante toda la reunión, SEA EL RESPONSABLE DEL SERVICIO MÉDICO.
Seguiremos detrás de este asunto y os informaremos como hasta ahora, cuando haya novedades.